Cómo acercarse a las personas sin hogar

Acercarse a personas sin hogar

Acercarse a personas sin hogar y prestarles una ayuda eficaz requiere de una alta dosis de escucha activa, empatía y respeto, para poder ganar su confianza y romper así el estigma de la exclusión social por el que se percibe a estas personas como fracasadas y perdedoras, conociendo por el contrario sus historias de vida más allá de su apariencia externa deteriorada, a veces sucia y desaliñada, por las duras condiciones de vida en la calle.

En efecto, se trata de ver que detrás de sus penosas circunstancias, hay una biografía personal y familiar plagada de adversidades, de fracasos, pero también de éxitos, de proyectos de vida hechos realidad, pero que las adversidades de la vida ha golpeado con dureza, sumando así sucesivas pérdidas en un corto periodo de tiempo: de salud, trabajo, vivienda y vínculos familiares y sociales de afecto y apoyo, quedando las personas sin hogar solas y abandonadas al consumo de sustancias como medio de aliviar el dolor físico, emocional y moral, para poder así seguir soportando la dureza de su existencia.

Acerquémonos pues a estas personas sin caer en estereotipos y prejuicios, sin ideas preconcebidas, viendo también nuestra propia fragilidad. Miremos su corazón y no su apariencia, y no olvidemos que cualquiera de los que estamos a día de hoy integrados en la sociedad en una situación plenamente normalizada, podemos terminar en situación de calle si somos golpeados por la vida lo suficientemente duro.

"Acerquémonos pues a estas personas sin caer en estereotipos y prejuicios, sin ideas preconcebidas, viendo también nuestra propia fragilidad. "